Prólogo: “Iban oscuros por la noche sola”. Serendipia en talante dicotómico

Tras años de peregrinaje y mucha zozobra —quebranto e iluminación— existencial, la autora, radicada en México, descubre lo que para ella estaba cubierto, desconocido, en el mágico texto “Liminar”, prólogo de La llama doble. Y emprende el recorrido diacrónico desde la inmadurez incipiente del estilo dicotómico (1941) hasta su cabal enseñoreamiento (desde 1945). Y empieza la crónica de esta serendipia. Sí, ya serendipia está registrada en el Diccionario de la lengua española (23ª ed., 2014), con la siguiente definición: “Hallazgo valioso que se produce de manera accidental o casual”. También se recogen las voces serendípico, ca y serendipidad. Este ensayo sobre un discurso ensayístico de Eliana Albala constituye un auténtico acto de serendipidad.